El comunal del Partido Socialista de Chile en España, se adhiere al siguiente documento y solicita a los/as compañeros/as que lo difundan y recaben adhesiones al mismo. (AMFB)
DOCUMENTO
SOMETIDO A LA PRIMERA CUMBRE SOCIAL POR UN NUEVO CHILE
Santiago,
7, 8 y 9 de septiembre de 2012
DERECHO A VOTO DE LOS CHILENOS
RESIDENTES EN EL EXTERIOR, SIN CONDICIONES
Estimadas
compañeras y compañeros participantes en la Primera Cumbre Social por un Nuevo
Chile.
Las
organizaciones y personas residentes en el extranjero, cuyas nombres y firmas
aparecen más abajo, hacemos llegar un saludo muy fraternal a todos los
asistentes a este importante evento y les deseamos mucho éxito en sus deliberaciones
tendientes a la elaboración colectiva de un proyecto de país para un nuevo
Chile.
La
experiencia adquirida en los países en que residimos nos demuestra la enorme
importancia de la participación de las organizaciones de la sociedad civil en
esta tarea.
A
través de los compañeros y compañeras que hemos delegado a esta Cumbre, nos
permitimos someter a vuestra consideración el siguiente documento y
solicitamos, al mismo tiempo, vuestro apoyo a nuestra lucha por el derecho a
voto en el exterior.
EL VOTO ES UN DERECHO INALIENABLE Y
UNIVERSAL
Desde
el fin de la dictadura, en 1990, los chilenos residentes en el extranjero
venimos luchando para que el Estado chileno nos reconozca el derecho a votar en
el exterior, como ocurre en la inmensa mayoría de los países. La Constitución
establece que todos los ciudadanos, mayores de 18 años y que no hayan sido
condenados a pena aflictiva, pueden votar, sin hacer diferencia alguna con
respecto al domicilio, que esté establecido en Chile o en el extranjero.
En
este contexto, varios parlamentarios han presentado proyectos de ley destinados
a implementar este precepto constitucional. Incluso el gobierno de la
ex-Presidenta Michelle Bachelet envió al Congreso, en 2009, un proyecto en este
mismo sentido. Todas estas iniciativas fracasaron, ya que uno de los ’’amarres’’
de la Constitución adoptada durante la dictadura exige una mayoría calificada
para su aprobación. Los partidos de derecha se han opuesto a su adopción de
manera sistemática, ilegítima e
inaceptable.
En
2005, el entonces candidato Sebastián Piñera prometió el voto
en el exterior en las reuniones que sostuvo con compatriotas residentes en
Suecia y en España. Sin embargo, desde su ascensión al poder, insiste
majaderamente en la imposición de requisitos inaceptables y arbitrarios, tales
como la existencia de vínculo – concepto que nunca ha definido - así como la
obligación de haber visitado y permanecido en el país por un cierto períoodo,
para poder votar. A este respecto, la Corte Suprema declaró inconstitucionales
tales condiciones en base al principio de igualdad de todos los chilenos, donde
quiera que se encuentren.
MOVILIZACIÓN
DE LOS CHILENOS DEL EXTERIOR
El censo de 2005 indicó que 875.781 chilenos vivían
en el extranjero en ese año. Actualmente esta cifra se aproxima al millón, ya que
muchos compatriotas siguen saliendo del país, especialmente estudiantes,
diplomáticos, trabajadores temporales y funcionarios internacionales.
Las personas que por diversas razones debimos
emigrar nos hemos organizado en los países y ciudades en que vivimos,
estudiamos y trabajamos. No queremos perder nuestras raíces y nos sentimos
profundamente ligados al país que nos vio nacer. Queremos que nuestros hijos y
nietos sigan siendo y sentiéndose chilenos. Para ello, hemos pedido reiteradamente
que Chile se dote de un política de Estado hacia sus nacionales que se
encuentran fuera de su territorio, en materias como ayuda al retorno; reconocimiento
de diplomas obtenidos en el extranjero; apoyo a programas de historia,
geografía y cultura chilena destinados a la segunda y tercera generación;
incentivos a los adultos mayores que desean visitar el país; extensión de
beneficios sociales para los compatriotas pobres que habitan en el exterior y
se califican; la firma de convenios de seguridad social; mayor y mejor atención
consular, y muy particularmente la implementación a la brevedad posible del
voto en el exterior, demanda ésta útima que fue apoyada por más de los dos
tercios de los compatriotas encuestados en 2005.
Numerosas organizaciones de chilenos se han
movilizado por el derecho a voto realizando diversas actividades, tales como la
organización de votos simbólicos en varios países en las fechas en que ha
habido elecciones en Chile; la instalación de mesas en el Paseo Ahumada en Santiago
para solicitar firmas; manifestaciones ante los consulados y embajadas chilenas
como las que se realizaron con éxito en varios países el 17 de marzo de 2012;
encuentros internacionales como el que se realizó en Madrid en noviembre de
2011; el Seminario por el derecho a voto y otras reivindicaciones de los
chilenos del exterior que tuvo lugar en el Senado, en Santiago, el 23 de marzo
pasado, con el patrocinio de esta alta Corporación.
Es útil agregar que parlamentarios, gobernantes y
políticos de varios países nos han apoyado y siguen apoyándonos en esta lucha
por la obtención del reconocimiento de un derecho que a ellos les parece normal
en una sociedad democrática. En un mundo
cada vez más globalizado, el voto en el
exterior constituye un elemento imprescindible. En esta materia, debemos
lamentar que Chile no ha aprendido nada de sus países vecinos, que son
generosos con su nacionales residentes en el extranjero, como Argentina,
Bolivia y Perú. Tan atrasados estamos que en otras naciones el tema ya no es el
derecho a voto en las elecciones presidenciales y parlamentarias sino el
derecho a elegir a sus propios legisladores al Congreso Nacional, como ocurre
en Argelia, Italia y Francia. En el
presente año, los ecuatorianos en el extranjero no sólo votarán sino que elegirán
a sus propios diputados a la Asamblea Nacional.
Hay que decir que los países que nos han recibido
son más inclusivos y acogedores que nuestro propio país. Incluso, varios
compatriotas han sido elegidos parlamentarios y concejales o ocupan puestos
importantes en los gobiernos, en las universidades, en reputados centros de
investigación y en otros lugares de trabajo.
NUESTRO
APORTE Y REIVINDICACIONES
Los chilenos del exterior hemos hecho y estamos
haciendo un aporte considerable a nuestro país de origen. Durante los 17 años
de dictadura sensibilizamos y movilizamos la opinión pública internacional
contra las violaciones flagrantes de los derechos humanos en Chile. Enviamos
ayuda económica a nuestros familiares, iglesias, organismos de beneficencia y
otras entidades que sufrían las consecuencias del régimen militar.
Hoy seguimos consumiendo
productos chilenos y realizamos su promoción. Visitamos
nuestro país y lo promovemos como destino turístico para miles de amigos
extranjeros. Seguimos enviando millones de dólares en remesas e invirtiendo en
inmuebles y en pequeñas y medianas empresas. Cada vez que ocurre un terremoto
en Chile, nos mobilizamos inmediatamente para hacer llegar nuestra ayuda
solidaria a las víctimas de tales desastres. Al término de la dictadura
contribuimos, en un grado importante, a mejorar la pésima imagen internacional
que Chile había adquirido en ese período tan oscuro de nuestra historia.
Los chilenos del exterior reivindicamos el pleno
derecho a voto, en todas las elecciones generales, especialmente en las
presidenciales y parlamentarias, en igualdad de derechos y sujetos a los mismos
requisitos establecidos en la Constitución para todos los chilenos. En este
sentido, no aceptamos ningún tipo de condiciones relativas a viajar al país o
demostrar un vínculo especial de pertenencia a la nación para poder votar.
El 19 de julio pasado sostuvimos una conferencia
por internet en la que participaron compañeros y compañeras de Alemania,
Austria, Bélgica, Canadá, Chile, España, Francia, Noruega, Rusia y Suecia. En
este encuentro digital acordamos : a) participar en vuestra Cumbre Social;
b) aprovechar las Fiestas Patrias de septiembre, que todos celebramos
masivamente en los países en que residimos, para intensificar la campaña por el
derecho a voto; c) realizar manifestaciones por este mismo objetivo frente a
las embajadas y consulados chilenos, el sábado 20 de octubre de 2012, una
semana antes de las elecciones municipales; d) efectuar un encuentro
internacional en Viena.
En este contexto, solicitamos a los participantes
en la Primera Cumbre Social por un Nuevo Chile que apoye nuestras demandas
dirigidas al gobierno y al parlamento, tendientes
implementar a la mayor brevedad el voto en el exterior, sin condiciones.
Aprovechamos esta oportunidad para reiterar nuestro
pleno respaldo a una nueva Constitución para Chile y a las justas demandas de
los estudiantes, de los trabajadores y del pueblo mapuche.